Lo que sabemos con certeza
Dentro del equipo del Barómetro del Salario Emocional, sabemos que cada uno de nosotros es responsable de su propio Salario Emocional. Puede ser extremadamente útil para ti conocer y ser consciente de aquellos beneficios no económicos que percibes del trabajo, si estos beneficios son importantes para ti, si es suficiente o si deseas obtener más de estos elementos que componen tu Salario Emocional. ¿Por qué? Porque esto te ayudará a tomar las riendas de de tu vida laboral y a estar listo a la hora de enfrentar el futuro del trabajo y sus desafíos.
Dicho esto, también existe otra cosa que sabemos con certeza (y nuestro trabajo e investigación respaldan esto una y otra vez). Que a pesar de que cada persona es responsable de su Salario Emocional, los líderes de equipo, las estrategias de la empresa y la cultura de la empresa, juegan un papel central en ayudar a su gente a hacer uso de esta responsabilidad. Todos los líderes deben de ver su rol y verse a sí mismos como un agente de crecimiento y servicio y ver esta perspectiva como una oportunidad y ayuda que les ayudará a alcanzar sus objetivos. ¿Por qué digo esto? Porque cuando regresemos a nuestro trabajo nos enfrentaremos con una oportunidad única que nos permitirá rediseñar y redirigir la forma en que hacemos negocios y gestionamos nuestros equipos.
Cultura y una «mejor normalidad»
La cultura, las personas y el propósito de las organizaciones han demostrado ser centrales en la forma en que cada uno de nosotros ha manejado la situación hasta ahora. Sin embargo, estos factores serán aún más importantes cuando regresemos, ya que serán absolutamente clave para dar forma y diseñar el futuro que queremos para nuestras empresas, nuestros equipos y, en última instancia, para nosotros mismos.
Esto es lo que necesitamos saber con certeza: la cultura sucede. Incluso si no hacemos absolutamente nada al respecto, la cultura será visible y palpable. Se formará automáticamente sin que nos demos cuenta de qué factores actuaron para que esto fuera así. Dado que sabemos esto, ¿por qué no comenzamos intencionalmente a diseñar la cultura que queremos tener una vez que regresemos para comenzar a diseñar una «mejor normalidad» en lugar de una «nueva normalidad»?
Así es como un artículo de HBR describe la cultura: “La cultura es el orden social tácito de una organización. Da forma a actitudes y comportamientos en varios ámbitos y de manera duradera. Las normas culturales definen lo que se fomenta, desalienta, acepta o rechaza dentro de un grupo. Cuando se alinea adecuadamente con los valores, impulsos y necesidades personales, la cultura puede liberar enormes cantidades de energía hacia un propósito compartido y fomentar la capacidad que una organización tiene para prosperar.
La cultura también puede evolucionar de manera flexible y autónoma en respuesta a oportunidades y demandas constantemente cambiantes».
Tenemos frente a nosotros una oportunidad increíble y única para dar forma y responder a esta situación cambiante e inesperada. Podemos verlo como una nueva oportunidad para analizar dónde estábamos, qué sucedió, qué aprendimos y cómo queremos enfrentar el desafío que tenemos por delante. Si hay algo que no podemos ignorar es que se acerca una tormenta. No sabemos si lloverá, nevará o si será un tornado, pero depende de nosotros prepararnos para cuando llegue esto. Podemos optar por enfrentar la tormenta con solo una chaqueta o con todo el equipo disponible que tenemos a nuestra disposición. Definitivamente recomiendo que cada persona, líder de equipo y organización elija prepararse con los mejores recursos que tienen: su gente.
¡Preparado, listo, fuera!
¿Por dónde debemos comenzar? Primero, con una intención clara, honesta y abierta de empezar de nuevo y, lo más importante: escuchar y estar preparado para el cambio. Sé que esto no es fácil y créanme, a menudo se necesitan más agallas para cambiar que para bungee jumping. Porque cuando decidimos hacerlo, nos situamos en una posición en la que se comparte el control y los resultados no se prevén fácilmente. Creo, sin embargo, que definitivamente vale la pena intentarlo.
Uno de los ejercicios más poderosos que conozco en mi carrera en Desarrollo de Personas es extremadamente simple. Cuando lo realices, te darás cuenta lo poderoso que es. Te invito a que empieces a dar forma y diseñar tu «mejor normalidad». Se llama el ejercicio SÍ / NO.
Este es un ejercicio que te ayudará a concentrar tu energía en aquellos aspectos de tu trabajo que te entusiasman que realmente te gustan y que te gustaría tener más. También te mostrará qué aspectos debes de soltar. Soltar cosas en la vida es un elemento inevitable del crecimiento.
Observa tus respuestas (también puedes hacer este ejercicio con tu equipo) y escribe lo siguiente: ¿Qué deseas mantener y qué es lo que estás listo para soltar? Tus respuestas a este ejercicio tan simple te darán una indicación de los próximos pasos que debes de tomar. Y, lo más importante, no te olvides de disfrutar el proceso. Es parte del juego.
Últimos pensamientos
COVID 19 fue, y sigue siendo, una situación que ha afectado a la mayor parte de la economía global. Ha afectado negativamente a la mayoría de las empresas y ha cuestionado el propósito y la cultura de las organizaciones y sus líderes. Ha actuado como una lupa. Los agujeros, errores, inseguridades, problemas de comunicación o grietas se han vuelto más evidentes y sus efectos también se han vuelto más evidentes. Por otro lado, todo lo bueno en nuestro propósito, cultura y liderazgo ha florecido y ha cobrado vida. Se ha convertido en el pegamento que mantiene todo y a todos unidos.
¿Cómo deseamos avanzar? No podemos entrar a nuestra nueva normalidad esperando que todo sea exactamente como lo dejamos, como si toda esta situación fuera un paréntesis en nuestras vidas. Necesitamos comprender qué sucedió, qué nuevos pensamientos o aprendizajes hemos tenido para utilizar esta información como nuestra guia que nos ayude a dar forma a nuestra «mejor normalidad».
Empecemos a tomar la iniciativa y empezar a diseñar un futuro en el que todos deseamos estar. ¿Será perfecto? Probablemente no. Pero todos estamos tratando de mejorarlo y esto es lo que cuenta.
Somos una consultoría de desarrollo organizacional y de personas y ayudamos a las organizaciones a poner a las personas en el centro de su estrategia. Mostramos cómo realmente escuchar y comprender lo que sus empleados más valoran de su trabajo. Ayudamos a nuestros clientes a construir una cultura de confianza mutua, respeto y responsabilidad que permita que tanto la organización como las personas prosperen.
Será para nosotros un placer ayudarle a configurar su «mejor normalidad”. ¿Te apetece un café virtual con nosotros? Envíanos un correo electrónico a [email protected]