El Salario Emocional son los beneficios no económicos que obtenemos del trabajo, nos motivan, cambian nuestra percepción del trabajo y nos llevan al desarrollo personal y profesional.

El Salario Emocional será diferente para cada individuo. Para algunos, el aspecto más importante del trabajo puede ser la oportunidad de socializar y hacer amigos en el trabajo, mientras que para otros, esto puede no ser importante en absoluto ya que puede ser que el tener la oportunidad de convertirse en un experto en su campo elegido o maximizar su creatividad sea lo que más valoren.

El BSE es una herramienta online que mide el Salario Emocional de una persona que trabaja (ya sea por cuenta ajena o por cuenta propia). Al realizar el BSE se genera un informe individual en el que se detalla el Salario Emocional de esa persona, junto con un plan de acción para poder aumentarlo.

Aunque estos beneficios de remuneración flexible tienen un enorme valor para el empleado, éstos son fijos y relativamente fáciles de cuantificar. Sin embargo, los factores del Salario Emocional son variables y dependen de la cultura de la organización, sus líderes y las personas que trabajan en ella. Estos factores no siempre son reconocidos por el individuo, los líderes o la organización. Sin embargo, cuando se  toma conciencia de estos beneficios  y se actúa en concordancia pueden mejorar de manera continua teniendo así un enorme impacto en los empleados, la cultura que se vive y los resultados de la  organización.

No. La retribución flexible permite a los trabajadores destinar un porcentaje de su salario anual a productos o servicios (por ejemplo, vales de restaurante o guardería, seguro médico, gastos de transporte) para reducir su carga fiscal.  De este modo, los empleados obtienen un ahorro importante al tiempo que maximizan su salario económico neto anual.

El Salario Emocional va más allá del aspecto económico. Se refiere a aquellos factores que podemos obtener de nuestro trabajo  que no son económicos y la presencia o ausencia de estos factores tendrá un gran impacto en el bienestar de las personas en el trabajo, en el liderazgo y en la cultura de la empresa.

El Salario Emocional debe verse como algo adicional al salario económico (incluyendo aquí la retribución flexible). No como un sustituto.

Nuestra amplia investigación, que incluyó una prueba piloto del Barómetro con participantes distribuidos por 22 países, sugiere que hemos identificado exhaustivamente los elementos que componen el Salario Emocional. Las puntuaciones de validez y fiabilidad de la herramienta lo confirman. Es posible que haya otros elementos que sean importantes a nivel individual, pero medir este nivel de datos subjetivos haría que la herramienta fuera mucho menos fiable estadísticamente.

Las encuestas de compromiso de los empleados miden el grado de compromiso de los empleados con la misión, la visión y los objetivos de la organización. Aunque se trata de una información valiosa para una organización, rellenar una encuesta de compromiso de los empleados tiene poco o ningún valor para ellos. Nuestra investigación ha demostrado que, por el mero hecho de responder al BSE, una persona pasa por un proceso de evaluación de su trabajo a nivel profesional, social y personal, lo que probablemente dará lugar a un cambio de percepción. Además, los líderes y jefatura de la empresa pueden utilizar la información proporcionada por el BSE para identificar claramente las estrategias, las políticas y las herramientas que aumentarán el Salario Emocional de los empleados, lo que conducirá a un mayor compromiso.

No. Es especialmente difícil definir la felicidad. Creemos que la felicidad general no es una métrica adecuada en el lugar de trabajo. La felicidad abarca muchos aspectos diferentes de tu vida, algunos de los cuales no están relacionados con el trabajo. Sin embargo, las investigaciones al respecto demuestran consistentemente que el hecho de tomar conciencia de lo que tienes y de lo que valoras tiene una fuerte correlación con el bienestar. El BSE facilita esta conciencia en el lugar de trabajo.

No. Los informes individuales son confidenciales. Sin embargo, animamos a los individuos a utilizar el informe para discutir con su jefe, colegas o equipos sobre la manera de aumentar su Salario Emocional.

El BSE evalúa el Salario Emocional en el trabajo actual de una persona. Aunque el BSE puede ser utilizado por las personas para tomar conciencia de lo que es importante para ellas en relación con su trabajo, no está diseñado para ser utilizado por las organizaciones en el proceso de contratación y selección.

Es poco probable que una persona ignore por completo que tiene un Salario Emocional muy bajo antes de recibir el informe. Sin embargo, lo que el informe pondrá de relieve es qué factores son los más relevantes para la persona, junto con sugerencias y ejercicios para mejorar su Salario Emocional en estas áreas.

La responsabilidad del Salario Emocional recae a partes iguales en el líder, la organización, la cultura y cada individuo.

El primer paso es tomar conciencia del nivel actual de Salario Emocional de los empleados. Esta información será útil para iniciar un diálogo con los directivos, compañeros o equipos que puedan influir en el Salario Emocional de cada persona. La información recopilada por el BSE puede utilizarse para desarrollar estrategias y políticas destinadas a aumentar el Salario Emocional.

Con los datos proporcionados por todos los BSE cumplimentados, la organización tendrá una idea clara de qué aspectos del trabajo perciben y valoran actualmente sus colaboradores. Una evaluación corporativa de Salario Emocional ayudará a identificar pautas y tendencias en toda la organización.

Al completar el BSE, todos los empleados pueden empezar a identificar y responsabilizarse de su propio Salario Emocional, creando un cambio de perspectiva y conduciendo a la co-creación de estrategias de RRHH y de desarrollo de las personas más eficaces.

Aunque no fue nuestra inspiración, es fácil encontrar una relación, ya que muchos de los diez factores que constituyen el Salario Emocional pueden relacionarse con las necesidades sociales, la necesidad de reconocimiento y las necesidades de autorrealización.

El BSE es un cuestionario online que se completa en unos 10-15 minutos. Una vez completado, la persona recibe un informe detallado con una visión general de su Salario Emocional, un desglose de su Salario Emocional por factores y otra información importante, que incluye un plan de acción personalizado e ideas y ejercicios sobre cómo aumentar su Salario Emocional.

Las características únicas a destacar del BSE son

El BSE mide el Salario Emocional tanto de los empleados como de las personas que trabajan por cuenta propia.

El BSE mide únicamente los beneficios emocionales del trabajo, y nada que pueda medirse económicamente como cualquier aspecto de la remuneración flexible.

El BSE se basa en una definición de Salario Emocional investigada en profundidad y con una fiabilidad y validez estadística extremadamente altas.

Tanto el empleado como la organización se benefician cuando un empleado realiza el BSE: el empleado obtiene un análisis detallado de su Salario Emocional, y la organización obtiene información sobre aquellos elementos que podrían aumentar el rendimiento y la satisfacción del empleado.

El BSE anima a los individuos a hacerse cargo de su Salario Emocional y a ser proactivos cuando se desee aumentar.

Cambia con el tiempo, especialmente cuando se producen cambios importantes de carácter personal o profesional. Recomendamos encarecidamente que se evalúe el Salario Emocional de 8 a 12 meses o después de cualquier cambio importante en el trabajo para controlar su evolución.

No está en nuestra mano que los empresarios utilicen la justificación de tener un Salario Emocional alto en la organización para tomar decisiones sobre el salario económico. En todo caso, los empresarios no recibirán información que pueda identificar a ninguna persona y/o su puntuación de Salario Emocional. Es poco probable que cualquier organización que tenga un Salario Emocional alto a nivel organizacional tenga una cultura que apoye este argumento. Asimismo, corresponde al individuo sopesar la relación entre su Salario Emocional y su salario económico y tomar las decisiones oportunas.

Uno de los retos más comunes a los que nos enfrentamos cuando trabajamos con organizaciones es cómo integrar el Barómetro Salarial Emocional en una estrategia ya establecida en la que se están utilizando herramientas existentes para medir o analizar la experiencia, el compromiso y/o la cultura de los empleados.

Todas las herramientas de medición que se utilizan habitualmente en RRHH tienen un objetivo: decirnos si vamos por el buen camino y si las personas que trabajan con nosotros están de acuerdo con nuestra visión, estrategia y liderazgo.

Al medir las oportunidades disponibles y la importancia de diez factores para los empleados (Autonomía, Pertenencia, Creatividad, Dirección, Inspiración, Disfrute, Maestría, Crecimiento Personal, Crecimiento Profesional y Propósito), podemos ofrecer a las organizaciones una imagen completa de la organización desde la perspectiva del empleado.

Porque fomenta la responsabilidad mutua, es esencial para el futuro del trabajo, cambia nuestra percepción del trabajo, apoya una cultura de organización saludable, facilita el enfoque centrado en las personas y crea un marco que fomenta la comunicación abierta en la empresa.